09 Oct ¿Es rentable instalar placas fotovoltaicas en casa?
La instalación de placas fotovoltaicas en el hogar es la forma más sencilla de introducir en la vida diaria las energías renovables y aprovechar todas sus ventajas. Desde la derogación del impuesto al sol y la aprobación del Real Decreto Ley 15/2018, generar energía en tu propia vivienda es completamente legal y más sencillo que nunca.
Pero ¿hasta qué punto resultan rentables unas placas fotovoltaicas para autoconsumo? ¿Realmente conseguirás ahorrar en la factura de la luz?
Si te estás planteando instalar paneles solares en tu vivienda, te interesa leer antes este post y resolver tus dudas.
¿Cuánto tengo que invertir en las placas fotovoltaicas?
A la hora de calcular la rentabilidad de una instalación fotovoltaica hay dos elementos fundamentales:
- El precio de la instalación fotovoltaica
- El ahorro energético que vas a lograr gracia a ella.
En la última década el coste del vatio en las células solares de silicio, que son las más utilizadas, se ha abaratado en un 94%. Nos encontramos, por tanto, en un momento óptimo para apostar por este tipo de energía sostenible y renovable, pues el precio de placas fotovoltaicas se ha reducido mucho.
Hoy en día, el precio medio de una instalación de autoconsumo es de aproximadamente 1.500 € por cada kilovatio de potencia eléctrica. Si tomamos como referencia la potencia doméstica media más contratada en España, que es de 4,4 kW, el precio de una instalación fotovoltaica sería de unos 6.600 €.
Periodo de amortización de una instalación fotovoltaica
Aunque el precio de una instalación fotovoltaica puede parecerte un gasto inicial alto, tienes que considerar que desde el minuto uno estarás ahorrando energía eléctrica. La amortización, es decir el momento en el que la inversión realizada se iguala a la cantidad ahorrada, puedes deducirla con un sencillo cálculo en el que tienes que tener en cuenta:
- El coste final en bruto de la instalación
- Los beneficios o el ahorro económico que conseguirás al año gracias a tus placas solares o fotovoltaicas.
El primer elemento variará en función del tipo de placas que elijas y de la superficie que necesites cubrir. Para deducir el tamaño más adecuado para tu instalación, deberás tener en cuenta:
- Los kWh que consumes al mes
- Superficie útil disponible en el tejado
- Orientación
- Climatología
Todos estos factores condicionarán el precio final de la instalación, del que deberás restar las posibles ayudas o subvenciones para el autoconsumo energético con las que cuentan las comunidades autónomas y que, en su mayoría, cubren al menos el 30% del precio total de la instalación.
Por tanto, tu periodo de amortización lo obtendrás dividiendo el coste total de la instalación fotovoltaica (al que tendrás que restar las subvenciones) entre el beneficio anual en ahorro eléctrico en la factura de la luz.
Por ejemplo, imaginemos que tu instalación te cuesta 6.000 € y que obtienes una ayuda del 30%, o lo que es lo mismo, de 1.800 €. El precio total de tu instalación sería entonces de 4.200 €. En cuanto al ahorro de energía eléctrica obtenido, supongamos que es de 600 € anuales en la factura de la luz (50 € al mes). Pues bien, en 7 años habrás recuperado tu inversión y a partir de ese momento estarás obteniendo energía completamente gratis con tu instalación fotovoltaica, cuya vida útil estimada es de unos 25 años.
Como hemos comentado, las cifras varían en función de las características de la instalación y del lugar en el que esté situada. En todo caso, y para que te sirva de orientación, diversos estudios indican que el ahorro medio anual en el recibo de la luz de en una vivienda en España es de alrededor de un 65% y el periodo de amortización de una instalación fotovoltaica está entre los 7 y los 9 años.
Conclusión
Cómo ves, hoy en día la energía solar es una alternativa asequible y rentable para todas la viviendas, gracias a que en los últimos años se ha producido una mejora en la eficiencia energética de este tipo de instalaciones y una reducción de su precio.
Optar por instalar unas placas fotovoltaicas en casa, ya sea de forma individual o vecinal, tiene dos grandes ventajas:
- El aprovechamiento de un recurso natural gratuito, infinito y no contaminante.
- Un importante ahorro en el gasto anual en electricidad.
En definitiva, las placas fotovoltaicas para viviendas sí que resultan definitivamente rentables y son una forma asequible de invertir en energías renovables. Si ya te has decidido a comenzar a ahorrar en tu factura de la luz gracias a la energía solar, lo mejor es que te asesores con profesionales, para garantizar que tu instalación es la más adecuada para ti.
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